Ingredientes
- 180 gr. de galletas oreo
- 50 gr. de mantequilla sin sal
- 700 gr. de queso cremoso
- 2500 gr. de azúcar
- 300 ml. de nata
- 3 huevos
La tarta de queso oreo seguro que se acaba convirtiendo el postre favorito de los más pequeños de la casa. Su elaboración es tan sencilla como la de la tarta de queso tradicional, puede que hasta mucho más rápida.
Preparación de tarta de queso oreo
- Abre las galletas oreo y les quitas la crema que tienen en su interior. Las galletas las pones en un cuenco y machacas bien con el mortero hasta hacerlas polvillo. Luego las pasas por la batidora o la trituradora para asegurarte de que quedan bien hechas polvo.
- Si la mantequilla no está a temperatura ambiente, déjala unos minutos, para que se ablande. Ya más manejable, echa la mantequilla dentro del vaso de la batidora, junto con las galletas oreo pulverizadas y mezclas hasta obtener una masa negruzca.
- Vierte esta masa en el molde que vayas a usar para tu tarta de queso, que mejor si es desmontable, pero aún así te recomendamos que le pongas mantequilla o untes un poco de aceite para que no se te quede pegada.
- Reserva en la nevera para que se vaya cuajando la base.
- Mientras, vas a irte ocupando del relleno, para lo cuál vas a batir los huevos con el azúcar blanco hasta formar una mezcla blanquecina.
- Agrega el queso cremoso y la nata y lo mezlcas todo bien. Pasa la mezcla al vaso de la batidora y bate hasta lograr una mezcla homogénea.
- Ahora vierte el contenido de las galletas oreo que has quitado antes y vuelves a batir hasta que se mezcle todo bien en una sola mezcla única.
- La base de galletas oreo ya debería haber cuajado lo suficiente, de modo que la sacas y viertes la nueva mezcla que has hecho, esparciéndola bien por todos lados.
- Si quieres, y te han sobrado, puedes poner algunas galletas dentro de la mezcla o que adornen por arriba.
- Mete en la nevera y deja reposar unas 4 horas antes de servir para comer.